¿Quién debe ser el próximo manager en el Clásico Mundial?

IGNACIO SERRANO

Esa es la pregunta que acaba de formular la Federación Venezolana de Beisbol: ¿quién debe ser el manager de la Vinotinto en el próximo Clásico Mundial?

El torneo se llevará a cabo en marzo de 2017, y por primera vez en mucho tiempo, la entidad asoma un grupo de precandidatos, entre quienes es notable la ausencia de Luis Sojo, conductor de la escuadra criolla desde 2006.

El proceso, asegura Fevebeisbol, durará dos meses. En febrero próximo se dará a conocer el nombre de quien debe ser el timonel de la selección nacional.

¿Quién tendría que ser el elegido?

Son 11 precandidatos, según la lista de la federación.

Están los dos pilotos de Venezuela en las Grandes Ligas: Oswaldo Guillén y Alfredo Pedrique. Están otros cinco estrategas de la LVBP, además de Pedrique: Luis Dorante, Eduardo Pérez, Omar López, Henry Blanco y Carlos García. Están dos coaches de la MLB: Carlos Subero y Omar Vizquel. Está un técnico con importante trayectoria, pero sin trabajo hoy: Marco Davalillo. Está un ex pelotero que incursiona como ejecutivo: Carlos Guillén.

(Posteriormente a la publicación de esta nota, la federación aclaró que Carlos Guillén será gerente, y que el undécimo nominado en realidad es Omar Malavé. Valga la correción aquí también.)

Si la FVB se decanta por la experiencia, y debería hacerlo, tratándose de un cargo tan importante, ni Carlos Guillén ni Vizquel deberían ser elegidos. Ninguno de los dos ha tenido la oportunidad de conducir un equipo, por más que Guillén maneje desde las oficinas a los Tigres y tenga una academia de peloteros, y aunque Vizquel sea parte del staff de Detroit desde hace dos temporadas.

Davalillo tampoco tiene el roce, aunque desde otro punto de vista: ha sido galardonado en la LVBP y ha estado al frente de divisas en la Venezuelan Summer League y México, pero no ha hecho el recorrido completo en el sistema de ligas menores ni ha tenido a su cargo un roster estelar, todavía.

Técnicos como ellos podrían perfectamente apoyar como coaches. Y también podrían hacerlo algunos de los otros preseleccionados. Porque son, sin duda, el mejor y más completo grupo de técnicos venezolanos.

¿Querrá el cargo Oswaldo Guillén? Si la decisión es exclusivamente deportiva, si no hay inclinaciones políticas o de otra índole, debería ser el elegido. Es el Luis Aparicio, el Miguel Cabrera de la dirección. No sólo tuvo las riendas de un elenco en las mayores; también lo hizo durante casi una década y hasta conquistó una Serie Mundial.

Tiene la experiencia, tiene el oficio y tiene los resultados. Pero puede que no quiera. Que prefiera seguir como comentarista de ESPN Deportes, tarea que ha cumplido desde hace un par de años.

Pedrique, en ese caso, ocupa el segundo lugar en el escalafón. Ha sido piloto en las mayores, asistente de gerentes generales, coach de banca y dirigente en las menores y en la LVBP.

Dorante, Blanco, García, Subero y Pérez tienen roce. Todos han sido coaches en la gran carpa o están por serlo. Tienen camino como pilotos acá o en las menores.

Omar López está empezando su carrera. Tiene méritos, pero está claro que va unos pasos por detrás de sus compatriotas. Pudiera ser parte del equipo técnico ahora, ¿por qué no? Pero aún le falta camino para igualar a aquellos.

Veremos si Fevebeisbol cumple su palabra y esta vez sí busca al mejor entre todos los citados. Si es así, la prioridad debería tenerla Oswaldo Guillén o Pedrique.

En febrero sabremos si es así.