En el juego de la agencia libre, existen los peloteros caros que no sólo reciben un contrato millonario, sino también un empuje publicitario importante. Y luego están los jugadores útiles. Este tipo de peloteros va a recibir un contrato, pero no será de nueve cifras. Ellos pueden ayudarte a ganar, pero no serán el centro de atención mientras el desfile de figuras disponibles en el mercado recorra todo el invierno.
Afianzado en esta segunda categoría vemos al jardinero Gerardo Parra. El venezolano ha ganado dos Guantes de Oro. Apenas tiene 28 años de edad. Batea y tira a la zurda y hace ambas cosas con mucha aptitud. Parra es un jugador a quien le gusta demostrar su energía en el terreno de juego. Se trata de un pelotero que puede ayudar a cualquier equipo a ganar, tanto en el 2016 como en un futuro más lejano.
Según los informes, Parra busca un contrato de cuatro años y hasta ahora se dice que solamente ha recibido ofertas de tres temporadas. Esta es la clase de diferencia que se puede resolver por sí misma y no debería terminar en desempleo.
Parra dividió la campaña del 2015 entre Milwaukee y Baltimore. También tuvo esencialmente dos temporadas diferentes.
Tras un comienzo flojo y acción esporádica con los Cerveceros en el arranque de la campaña, Parra recibió más tiempo de juego tras la contratación de Craig Counsell como piloto a principios de mayo. En poco más de 100 juegos por Milwaukee, Parra produjo promedio de .328, porcentaje de embasarse de .369 y slugging de .517. Cuando Counsell lo colocó como primero en el orden, su desempeño fue aun mejor. En 38 compromisos como 1er bate, Parra tuvo de .340/.386/.545.
"Desde que fue colocado como primero en la alineación, el muchacho ha sido parte muy importante de nuestra ofensiva", destacó Counsell en esos momentos. "Ha sido uno de los mejores bateadores en la liga. Se ha visto bastante bien. Definitivamente, ha marcado la pauta de nuestra ofensiva".
Pero los Cerveceros decidieron comenzar un proceso de reconstrucción y en una transacción antes de la fecha límite de cambios, Parra fue enviado a Baltimore a cambio deZach Davies, un legítimo prospecto del pitcheo.
La producción ofensiva de Parra mermó de manera considerable con los Orioles. Aunque sus números combinados en la temporada fueron aceptables -- .291/.328/.452 - el venezolano no aportó lo que Baltimore esperaba de él para ayudarlos a avanzar a la postemporada.
Su desempeño con Baltimore en la recta final de la campaña pasada podrían estar pesando sobre el valor del jardinero en la agencia libre. Pero estamos hablando de un pelotero todavía capaz de aportar bastante ayuda a un club con aspiraciones de jugar en octubre.
Parra ganó un Guante de Oro como jardinero izquierdo jugando por un equipo de Arizona que ganó su división en el 2011. El zuliano se adjudicó otro Guante de Oro como jardinero derecho en el 2013, también con los D-backs.
Parra defendió cada uno de los tres jardines en el 2015. A esta altura de su carrera, probablemente no sea el prototipo de un guardabosque central, pero sin duda sigue siendo un pelotero destacado a la defensa.
Y Parra no tiene el poder suficiente para producir esos grandes números que un equipo esperaría de un jardinero de una de las esquinas. Pero es capaz de producir extrabases: 36 dobles el año pasado y 43 en el 2013, su mejor temporada en dicha categoría.
Al sumar todas sus cualidades, llegamos al siguiente perfil: Un jardinero versátil y muy capaz, un respetado bateador de Grandes Ligas quien batea a la zurda, sin cumplir aún los 30 años y un individuo a quien, como él mismo lo expuso, le gusta ver a peloteros "jugar duro y jugar felices".
Podemos entender por qué la presencia de Parra en la agencia libre no está acaparando los titulares a diario. Pero también podemos comprender por qué su próximo equipo probablemente estará haciendo una buena inversión al momento de firmarlo.
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