Sigue en el aire el destino de Prince Fielder y dónde jugará a partir del 2012 y en los años siguientes, pero yo tengo una opinión bien definida al respecto.
Si fuera Nolan Ryan, presidente de los Rangers de Texas, haría todo lo posible por asegurar de que Fielder estuviera como cuarto o quinto bate de un lineup ya potente de por sí.
Si el equipo contrario pone un derecho, pondría a Fielder de cuarto, detrás de Josh Hamilton. Con esto Hamilton seguramente vería mejores pitcheos. Si la oposición inicia con un zurdo, el manager Ron Washington podría dividir a Fielder y Hamilton, con el dominicano Adrián Beltré en el medio.
El agregar a Fielder haría del ataque de los Rangers el mejor de Grandes Ligas, y por mucho.
Los Angelinos han agregado al dominicano Albert Pujols, dándole lo que considero un contrato desubicado en cuanto a duración se refiere. Como hombro de negocios, no hay manera de que yo firmara a un pelotero de 31 años a un pacto de 10 temporadas. No habrá forma de que los Angelinos vean la misma producción del toletero en los últimos cinco años del contrato que en los primeros cinco.
De hecho, Ryan ha dicho que no quiere otorgar contratos de tanta duración. Entonces, ¿cómo podría convencer a Fielder a firmar con los Rangers? Es sencillo: hay que ofrecerle un contrato de cinco años que le dé un salario anual que iguale y hasta supere el de Pujols, para compensar el hecho de aceptar un acuerdo de menos años que el del dominicano. Luego sólo restaría confiar en que Fielder ponga los números de siempre en los próximos cinco años. De ahí se convertiría otra vez en agente libre a los 32 años. Para ese entonces habría cambiado de nuevo el mercado y podría firmar un contrato que le dé cerca de US$30 millones anuales.
Al firmar a Pujols y a C.J. Wilson, los Angelinos se han colocado por encima de Texas en el Oeste de la Liga Americana. Los Angeles cuenta con el cuerpo monticular más probado, pero si los Rangers firmaran a Fielder, no existiría una alineación en Grandes Ligas que pudiera siquiera acercarse a los números ofensivos que produciría el equipo texano. Y cuando cuentas con ese tipo de ataque, hay menos presión para el pitcheo.
Los Rangers cuentan con algunos buenos brazos jóvenes en una rotación que incluye a Derek Holland, el dominicano Alexi Ogando, su compatriota Neftalí Féliz y Matt Harrison. Además, siguen en Texas los veteranos Colby Lewis y Scott Feldman.
En mi opinión, el firmar a Fielder convertiría a Texas no sólo en favorito para ganar el Oeste de la Americana, sino también conquistar la Serie Mundial.
Mi consejo a Fielder sería el siguiente: confía en tus habilidades y acepta un pacto de unos cinco años con un equipo que pueda ganar una Serie Mundial. Hay que estar consciente de que te esperará un dinero aun más grande cuando se agote ese contrato. Tendrás al menos un anillo de campeón, y posiblemente más. Y en ese estadio de Texas, podrías conectar 60 jonrones.
Mitch Williams fue lanzador en Grandes Ligas de 1986 a 1997 con los Rangers, Cachorros, Filis, Astros, Angelinos y Reales, mayormente como cerrador. Salvó un total de 192 juegos en la Gran Carpa. Es analista de MLB Network desde el 2009
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