FORT MYERS, Fla. - Los Marlins de la Florida hicieron su único viaje para enfrentar a los Mellizos de Minnesota en Fort Myers. El juego significaba que los campeones de bateo de ambas ligas del 2009 estaban en el mismo estadio.
Y aunque Joe Mauer no estaba en el lineup, el dominicano Hanley Ramírez sí lo estaba como shortstop de los Marlins.
En el 2009, Ramírez ganó la corona de bateo en la Liga Nacional con su promedio de .342, mientras que Mauer lo hizo en la Liga Americana con un tremendo porcentaje de .365.
Tradicionalmente, los receptores y torpederos no son candidatos muy comunes a ganar coronas de bateo, debido a las exigencias físicas de sus posiciones. Tomen en cuenta que, antes de que Mauer ganara su primer campeonato de bateo en el 2006, tuvimos que irnos hasta Ernie Lombardi con los Bravos de Boston en 1942 para encontrar al último cátcher que ganó una título de bateo.
Ramírez, por su parte, es el primer paracorto de la Liga Nacional en llevarse la corona desde que Dick Groat lo hizo con los Piratas en 1960.
"Cuando sabes batear, sabes batear", dijo Ramírez cuando se le recordó que Mauer era receptor. "No hay nada que puedas hacer al respecto. Siempre ha sido un gran bateador, incluso en ligas menores. No es como que llegó de la nada para batear .365. Todos saben de lo que es capaz con el bate, y que lo seguirá haciendo por mucho tiempo".
Ramírez es el primer Marlin en la historia de la franquicia en ganar un título de bateo. Lo que impresiona al coach de bateo de la Florida, Jim Presley, es la forma en que Ramírez se enfoca en el plato para conectar hits, en lugar de buscar la barda.
"Normalmente, un campeón de bateo sabe cómo conectar la bola a la banda contraria", destacó Presley. "Hanley podría conectar 30 cuadrangulares si quisiera. Y si lo hace pudiera terminar bateando para .310. Tienes que mantenerte dentro de la bola, tienes que ser físicamente fuerte. No vas a ver muchos campeones de bateo débiles".
Ramírez conectó 24 jonrones en el 2009, produjo 106 carreras y anotó 101 veces.
"No estoy preocupado por los cuadrangulares", admitió Ramírez. "No busco los jonrones. Simplemente quiero embasarme y producir carreras. Eso es lo que quiero hacer. Sólo trato de conectar la bola al hueco, eso es todo. Los números no me preocupan mucho".
El manager de los Marlins, el cubano Fredi González, dice que la percepción en el equipo cuando Ramírez es dominado tiene más qué ver con él que con el lanzador de la oposición.
"Nos sentamos en el dugout todo el día y decimos, 'Él mismo se pone out, porque no hay un lanzador ahí afuera que lo pueda dominar'", manifestó González. "Tiene esa clase de talento".
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