Con Mark Trumbo, los Orioles sabían que tendrían a un jugado capaz de darle fuerte a la bola.
El toletero llegó a la temporada del 2016 con 131 jonrones de por vida, pero lo que ha hecho por Baltimore ha sido algo sorpresivo. En particular, los últimos siete imparables de Trumbo han sido cuadrangulares, un logro que remonta al 11 de agosto.
Su último batazo largo, el lunes contra los Nacionales, puso su total de bambinazos para la campaña en 38, la mayor cantidad en Grandes Ligas.
Trumbo se convirtió en el primer jugador de los Orioles con siete jonrones seguidos que sean cuadrangulares. El récord de Grandes Ligas es de 11, de parte de Mark McGwire en el 2001. Ningún jugador en la historia, aparte de McGwire, ha llegado a ocho.
"No se explica", dijo Trumbo al preguntársele sobre el hecho de que sus últimos siete hits sean jonrones. "Estaba consciente de ello, pero así es el béisbol.
"Creo que a veces el estadio ha ayudado un poco", continuó. "Quería darle la bola más por el aire este año. Esa fue la mentalidad llegado a la temporada y todo el trabajo en el invierno fue con eso en mente".
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