Es cierto que los Cardenales de San Luis fueron los "perdedores" en la guerra de ofertas por dos agentes libres de lujo.
No obstante, los últimos años nos han demostrado que los Cardenales son ganadores. Y una vez merme el alboroto de la agencia libre, bastará con darle un vistazo al roster de San Luis para darse de cuenta de que se trata de un equipo que está lejos de ser irrelevante.
Los Cardenales seguirán adelante sin David Price, el lanzador más cotizado del mercado. Y también procederán sin una de sus piezas clave del 2015, el guardabosque Jason Heyward, quien se marchó vía la agencia libre.
Price firmó con los Medias Rojas. Pero Heyward se unió a los rivales Cachorros, decisión que desde el punto de vista de San Luis equivale a una deserción.
Como si fuera poco, Heyward opinó que, a largo plazo, el futuro de los Cachorros luce más brillante que el de los Cardenales porque Chicago cuenta con jugadores jóvenes, mientras que algunas de las piezas angulares de San Luis - el boricua Yadier Molina, Adam Wainwright y Matt Holliday en particular - están mucho más cerca del final de sus carreras como ligamayoristas.
Primero que nada, esos tres jugadores se siguen destacando como peloteros y así será hasta que ellos lo decidan. Segundo, durante los últimos 70 y tantos años, cualquier comparación sensata entre los Cardenales y los Cachorros deja al club del Norte de Chicago en un segundo lugar bien distante. Si los Cachorros lucen tener la delantera ahora mismo, se trata de una excepción, no la regla.
Ahora, repasemos cómo lucirían los jardines de los Cardenales en el 2016 sin Heyward. Está Holliday y dos talentosos jóvenes, Randal Grichuk y Stephen Piscotty. Tommy Pham representa una profundidad de calidad.
Grichuk es un jugador dinámico, mientras que Piscotty es un producto de la finca de San Luis que rinde a nivel de Grandes Ligas con tanto aplomo que da la impresión de ser un ligamayorista con una década de experiencia.
¿Qué tal la rotación de los Cardenales sin Price? Cuentan con Wainwright, un brazo probado y un líder auténtico que viene de ser operado del talón de Aquiles izquierdo; dos jóvenes con el dominicano Carlos Martínez y Michael Wacha; y un zurdo probado, el mexicano Jaime García, para quien es preciso mantenerse en salud.
Tim Cooney, Tyler Lyons y Marco Gonzales competirían por el quinto puesto. Y como de costumbre, hay otros prospectos de pitcheo prometedores en la finca de San Luis.
No obstante, ante la baja de Lance Lynn, quien se sometió a una cirugía Tommy John, era concebible que los Cardenales buscaran agregar a un abridor establecido. Aún hay opciones en el mercado en ese sentido y los Cardenales obviamente tienen los recursos para hacer semejante movimiento.
Pero estamos hablando de un equipo que en tres temporadas consecutivas se ha coronado en la Central de la Liga Nacional, división que tuvo a los tres equipos con las mejores fojas en Grandes Ligas en el 2015. Se trata de un club que sumó 100 victorias - el mejor récord de la Gran Carpa - luego de haber perdido a su mejor prospecto en un accidente automovilístico y sufrido una serie de lesiones de miembros claves de la rotación, el bullpen y el orden ofensivo.
Todo eso fue posible porque San Luis ha construido un equipo ganador basado en profundidad de la organización - una clase de profundidad que engendra un éxito autosuficiente. De hecho, haber firmado a Price o a Heyward por un monto sin precedentes hubiese sido inconsistente con el modus operandi de la organización.
El equipo de San Luis ha ido reforzándose poco a poco desde que terminó la temporada.Jedd Gyorko les brinda un mejor bate como utility. El cubano Brayan Peña representa una mejoría en el puesto de receptor suplente en cuanto a ofensiva se refiere. A los Cardenales aún les queda esperar que la segunda cirugía del pulgar izquierdo a la que se sometió Molina sea exitosa y que el puertorriqueño esté listo para el inicio de la campaña del 2016.
Los Cardenales no consiguieron a los agentes libres más caros y más cotizados, pero hay un Plan B - su forma original de hacer las cosas. Lo dijo el gerente general del club, John Mozeliak, hablando de sus reveses en el mercado de agentes libres:
"La manera en que te adaptas y manejas algo así requiere que vuelvas a tus principios y lo que representas y lo que ha sido la esencia de la organización. En nuestro caso, hemos hallado el éxito con nuestra propia fuente de talento y creo que vamos a seguir dependiendo de ella.
"Me gustaría pensar - y quizás estoy hablando como el eterno optimista que soy - que tenemos talento en camino. Tenemos algunos jugadores jóvenes alrededor de los cuales queremos construir. Ojalá que al final esta organización pueda presumir de ello. El tiempo nos lo dirá. No vamos a quedarnos a un lado".
Es cierto que los Cachorros lucen más competitivos ahora. Pero eso no significa que los Cardenales de San Luis vayan a pasar al olvido.
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