Reales quieren salir del fondo

Si alguien le dice que el abridor estelar de su equipo es Zack Greinke y que el cerrador se llama Joakim Soria, obviamente el fanático de ese club se consideraría fascinado con las posibilidades de ganar aunque sea el cetro de la división.




Los Reales de Kansas City son los afortunados de contar con los servicios de Greinke, el fuera de serie que ganó el Cy Young el año pasado, y el mexicano Soria, el cerrador con 72 rescates las dos últimas campañas.



Pero la sensación que prevalece es que están aún lejos de ser un candidato en serio en la Central de la Americana, una división que por lo demás está para cualquiera.



Lo ocurrido en 2009 convalidó la percepción. Tras ganar 75 partidos en 2008, su mejor campaña desde 2003, se creía que darían pelea y el inicio 18-11 fue alentador.



Justo cuando se creía que daban el despegue, el globo de los Reales se desinfló y terminaron compartiendo con Cleveland la cola en la división con foja de 65-97.



Hay un mundo de disparidad entre el derroche de clase de Greinke, Soria y el primera base Billy Butler con lo que rinde el resto de la tropa.



Sólo se tiene que deparar en el detalle de que la efectividad de Greinke fue un ínfimo 2.16 y que la mejor de los otros cuadros abridores fue de 4.73.



Han pasado cuatro años desde que Dayton Moore fue contratado como gerente general para enderezar el rumbo de la franquicia, pero aún siguen estancados.



Eso sí los Reales siguen poniendo empeño con una organización de ligas menores repleta de prospectos y más interesados en buscar talento en Latinoamérica.



Moore dicen que los resultados llegarán en su debido momento: "Me siento tranquilo con el avance que hemos hecho. Sabíamos con lo que nos íbamos a topar. Sabíamos que clase de desafíos íbamos a tener. Vamos a seguir trabajando con nuestras sucursales en las menores".



Mientras eso pasa, los Reales intentarán escalar de a poco en la tercera campaña bajo la conducción del manager Trey Hillman.



Greinke necesita imperiosamente que sus socios de rotación no le dejan la tarea sólo a él. Un factor mitigante fue que los derechos Gil Meche, Kyle Davies y Brian Bannister padecieron lesiones durante el pasado curso y eso incidió negativamente.



Un Meche sano es clave al tomar en cuenta que ganó 23 juegos con 3.82 de efectividad en sus dos primeras campañas en Kansas City. Luke Hochevar y el dominicano Robinson Tejeda (3-1 y 2.84 en seis aperturas durante septiembre) luchaban por la última plaza.



Otro dolor de cabeza es facilitar que Soria no tenga que lanzar más de una entrada, puesto que encabezó las mayores con sus cinco salvamentos de dos innings. El dominicano Román Colón pinta para ser preparador.



La otra estrella es Butler, quien recién cumplirá los 24 años en abril. ¿Qué hizo? Pues de todo: lideró al club en promedio (.301), embasado (.362), jonrones (21), remolcadas (93) y dobles (51).



Butler, sin embargo, fue un solitario soldado dentro del andamiaje ofensivo que sintió el efecto de que el dominicano José Guillén se vio limitado a 81 juegos por las lesiones y apenas conectó nueve jonrones.



Algo que llama poderosamente la atención es que hayan decidido relegar a la banca al infielder venezolano Alberto Callaspo para darle la titularidad en la intermedia a Chris Getz, adquirido en un canje con los Medias Blancas de Chicago, porque éste último es mejor defensivamente.



Se ha cuestionado al resaltarse el hecho que Callaspo bateó para .300 y fue el líder de carreras anotadas con 79. Pero la verdad es que Callaspo estuvo fatal con el guante con sus 17 errores y empató el liderato de los intermedistas en ese renglón.



Los Reales confían que un Guillén recuperado de sus molestias físicas pueda aportar la clase de producción que entre 2007-08 redituó 43 jonrones y 196 remolcadas. Guillén dejará los jardines para estar más tiempo como designado.



Otra pieza importante es el jardinero derecho David DeJesús, cuyo total de carreras remolcadas ha oscilado en las 70 los dos años recientes.



Los otros dos jardineros son nuevos: Scott Podsednik (izquierdo) viene procedente de los Medias Blancas y Rick Ankiel (central) es un ex de San Luis. Podsednik, quien se robó 30 bases y tuvo .353 de embasado en 2009, será el primer bate.



No vendría mal que el tercera base Alex Gordon finalmente explote. Segunda selección en el draft de 2005, Gordon apenas tiene un promedio de .250 en tres temporadas en las mayores.



El torpedero cubano Yuniesky Betancourt y el catcher Jason Kendall ocuparán los dos últimos puestos del lineup. No es por casualidad, ya que ambos batearon para menos de .250