BEISBOL 007: Apuntes de un fanatico /columna de Pedro Reyes

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miércoles, 28 de abril de 2010

Apuntes de un fanatico /columna de Pedro Reyes

¿Será verdad?




Sin son ni ton uno de los mandamás de los Yanquis asomó que desea que Derek Jeter permanezca con el equipo por los siglos de los siglos. O sea, que cuando el hombre se quite los aperos de jugador lo haga en el dugout de esa divisa. Alabanzas van y alabanzas vienen. Son flores propias de los años felices del matrimonio y porque, además, hablamos de un pelotero a quien las pitonisas le auguran la morada en Cooperstown. Pitonisa: adivinadora. En el DRAE la palabra no aparece para referirse al género masculino. Si la elección se hiciera en este momento, nadie niega que llegará de un viaje al Salón de la Fama. ¿Quién pone en dudas que será igual en un futuro?



No existe ni existirá un hombre que haya hecho más por el béisbol que Babe Ruth y sin embargo, a los directivos de la organización de Nueva York no les tembló el pulso cuando tuvieron que cesantearlo en 1935 y lo enviaron a los “Boston Braves”. Es verdad, ya estaba de salida y era solamente una referencia. Hay miles de casos con nombres que después tuvieron vigencia sobre el terreno unos cuantos torneos más. ¿Recuerdan cuando después del no hit no run el 11/08/91 frente a los Orioles de Baltimore a Wilson Álvarez, Chicago le puso el calificativo del “Intocable”? Seis años después ya estaba en otra franquicia. Tiene razón Tito Rojas con aquello de que “nada es eterno en la vida”.



En Baseball-Almanac, a Jeter le atribuye una frase que refuerza la posible eternidad suya con el uniforme del equipo de los Steinbrenner: “Quiero que me recuerden como alguien que tiene un profundo respeto por el juego, sus compañeros de equipo y por los tivales y quiero ser recordado como un ganador. Pero lo más importante es que quiero ser recordado como un jugador de los Yankees". Y pensar que esa confesión tiene unos cuantos años. Son dieciséis campañas con la misma organización desde que el 29 de mayo de 1995 apareció en el Kingdome contra los Marineros de Seattle. No dio hit en cinco oportunidades como noveno en la alineación. En el bando enemigo estaba Luis Sojo como defensor de la segunda base. Tiempo después ambos coincidieron en la tropa de Nueva York y se hicieron amigos. No olvidemos que DJ ha estado en Venezuela para asistir a actividades de la Fundación Sojo.



Por cierto, nuestro personaje de esta columna cumplirá 36 años de edad el sábado 26 de junio y no estará actuando en la propia querencia yanquista, sino en el Dodger Stadium. Tendremos en proceso los partidos interligas. Desbaratando encajes para llegar hasta el hilo, fuimos a parar al primer Juego de las Estrellas disputado por este súper jugador, el 7 de julio de 1998, en el Coors Field de Colorado. Para los coleccionistas de curiosidades vale la pena acotar que para el famoso clásico, por la Liga Americana tambièn asistieron Omar Vizquel –Indios de Cleveland– y Alex Rodríguez –Marineros de Seattle–. Digamos que en algún momento los tres coincidirán en el Salón de la Fama.



Camino hecho al andar: Siete torneos con más de 200 hits cada uno (203, 219, 201, 202, 214, 206, 208). Igual número superando los cien imparables (183, 190, 191, 191, 156, 188, 179). En su debut apenas vio acción en 15 batallas con 48 turnos y 12 incogibles. A la hora de redactar este trabajo en la presente zafra exhibe 16 inatrapables en 46 ocasiones. 2.148 encuentros con 2.763 batazos a terrenos sin custodios, 8.705 presencias en el plato. Si suponemos que se mantiene uniformado cuatro años más, dejemos que las pitonisas saquen sus cuentas. Y en cuanto a fildeo, no es segundo de nadie: 4 Guantes de Oro (2004, 2005, 2006, 2009) y porcentaje de por vida superior a 900 puntos. Además, 10 Juegos de Estrellas (98, 99, 2000, 2001, 2002, 2004, 2006, 2007, 2008, 2009), 4 Bates de Plata (2006, 2007, 2008, 2009), Novato del Año (1996), Ganador de los premios Hank Aaron (2006, 2009), Roberto Clemente (2009). Casi interminables son los reconocimientos que ha recibido.



Y aunque parezca que nos contradecimos con el inicio de lo redactado en esta ocasión, uno entiende el porqué del sueño de los directivos yanquis en aspirar la eterna eternidad de Derek Jeter en el famoso conjunto.



…SON APUNTES DE UN FANÁTICO…



Columna publicada el 19/04/2010

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