LAKELAND, Florida - Aníbal Sánchez aún luce capaz de correr en carreras de distancia como pasatiempo cuando termine su carrera en el béisbol. Tomando en cuenta que no es muy alto - oficialmente mide seis pies - cuando corre por alrededor de los jardines después de hacer tiros, el venezolano abarca bastante terreno con cada paso sin tener que hacer gran esfuerzo.
"Este año, no corrí mucho", dijo Sánchez sobre su receso de temporada. "Pasé más tiempo en el gimnasio e hice más ejercicios cardiovasculares. Invertí más energía en esa área".
Luego de perderse el último mes y medio de la temporada del 2015 debido a una inflamación en el manguito rotador del hombro derecho, el serpentinero le dedicó tiempo a todo el cuerpo durante el invierno. No solamente se enfocó en fortalecer el hombro de lanzar, sino que tuvo como meta tener más flexibilidad en dicho hombro y en el torso. También fortaleció sus piernas.
Se trata de un ajuste para un pitcher que se ha destacado como uno de los jugadores más trabajadores en los entrenamientos desde que se integró a los Tigres.
"El enfoque este año está en evitar las lesiones que tuve el año pasado", dijo Sánchez. "He recibido muy buena terapia física que me ha permitido librarme de cada lesión y de cada rigidez en mi cuerpo y espero que eso me ayude en la temporada".
Sánchez efectuó 50 pitcheos en una sesión del bullpen el miércoles. Su movimiento rotativo antes de soltar la bola fue más sutil que el del año pasado. El ajuste no se debe a la lesión del hombro, sino a los 29 jonrones que Sánchez permitió en el 2015 y su efectividad de 4.99.
Durante toda la temporada, Sánchez trató de determinar por qué un pitcher que jamás había cedido más de 20 cuadrangulares en una campaña había permitido 18 bambinazos antes del receso del Juego de Estrellas y 21 para concluir el mes de julio. Al final de este mes, Sánchez se sentó a comparar videos de sus salidas en el 2015 y el 2013, campaña en la que permitió apenas nueve jonrones en 182 innings de labor y encabezó la Liga Americana en promedio de carreras limpias.
"Giraba demasiado. Me mecánica no estuvo normal el año pasado", dijo Sánchez. "En el 2013, todo estaba cerrado en un solo movimiento, y quiero trabajar en eso".
"No estoy insinuando que quiera tener los mismos resultados [que en el 2013]. Me gustaría tener una mejor campaña este año, pero estoy trabajando en ese aspecto de mi mecánica".
Sánchez no sabe si los problemas con su mecánica incidieron en sus problemas de salud.
"En el 2013 también me lesioné", dijo el oriundo de Maracay. "No voy a [afirmar] que haya sido por haber hecho esto o aquello. Creo que las lesiones son parte del juego. Incluso las personas que corren mucho se pueden lesionar las rodillas. Tratamos de evitar las lesiones, pero son parte del juego también".
Sánchez no ha fijado metas en cuanto a sus números se refieren, por lo menos públicamente. Luego de dos temporadas abreviadas por diversas lesiones, su meta es simplemente lanzar y mantenerse en el montículo durante la temporada completa. El veterano considera que de lograrlo, las estadísticas lo reflejarán.