ST. PETERSBURG -- Desde el 9 de julio, aquel día sublime en el que Derek Jeter, quien necesitaba un par de hits para sumar 3.000, conectó cinco imparables (entre los cuales hubo un espectacular cuadrangular ante David Price), el capitán de los Yankees de Nueva York solamente ha tenido seis hits en 30 turnos al bate (.200).
En el mismo lapso, Brett Gardner, quien bateó en o cerca del fondo de la alineación la mayoría de los días, ha tenido una producción ridícula: marcó un promedio de .536 (28-15) con un porcentaje de embasamiento de .594. Además, anotó seis carreras y robó cinco bases.
Si alguna vez hubo un buen momento para que Joe Girardi haga un cambio en la parte superior del orden de bateo, ese momento es ahora.
No sólo lo dicen los números, sino también las circunstancias.
Jeter ha logrado su objetivo, y de modo espectacular. Los fans de los Yankees y todo el universo del béisbol han tenido suficiente tiempo para celebrar su logro.
Y lo mejor de todo es que la condición del roster de los Yankees prácticamente dicta que ahora es el momento de reorganizar la alineación. No debe parecer que Jeter ha sido degradado -- esto es de vital importancia -- sino simplemente desplazado hacia abajo por el bienestar del equipo.
Durante ese lapso de cinco partidos entre el 4 de julio -- la fecha del regreso de Jeter a la alineación después de pasar un tiempo en la lista de lesionados con un tirón en la pantorrilla -- y aquel sábado festivo en el Yankee Stadium, el tema del lugar de Jeter en el orden de bateo básicamente quedó en pausa, y cualquier conversación sobre bajarlo de su puesto como primer bate pasó a ser extraoficialmente, aunque indiscutiblemente, tabú.
No obstante, el tema volvió a surgir durante una sesión de medios reciente de Girardi, y el manager reconoció claramente, aunque con algo de reticencia, que es muy posible que en algún momento de la campaña Jeter tenga que ceder el lugar de bateador inicial.
"Bueno, es algo que pensamos en algún momento", dijo Girardi. "Es algo en lo que definitivamente piensas, ya sabes, en tal vez volver a poner [a Gardner] arriba en alguna parte. Quiero decir, no tengo planes de hacerlo. Aún no lo he hecho".
Eso sólo es cierto gracias a que una suspensión por lluvia el 8 de julio, la noche antes del 3.000 de Jeter, borró una alineación en la que Gardner batearía primero, Jeter segundo yCurtis Granderson tercero contra el abridor derecho Jeremy Hellickson, de los Rays.
Y Girardi reconoció que podría volver a planear una alineación así nuevamente cuando se enfrenten a un abridor derecho, aunque se apuró en señalar que eso no tendría nada que ver con los numeritos de Jeter, sino más bien con la disminución de hombres sanos en el roster.
La alineación del 8 de julio fue en parte el resultado de la ausencia de Nick Swisher, quien había sufrido una lesión en los cuádriceps, y de Alex Rodríguez, quien venía con problemas de rodilla -- los que eventualmente requirieron una cirugía.
Tres semanas más tarde, ésta aún tiene mucho sentido por varias razones. Si bien Swisher se ha recuperado, A-Rod está al menos a un mes de regresar, y posiblemente más.
El bateador No. 2 regular de los Yankees, Granderson, tiene 26 jonrones y 70 carreras impulsadas. Ha demostrado ser capaz de batear contra lanzadores zurdos y derechos. Probablemente sea más adecuado para el medio de la alineación que cerca del tope.
Y Gardner, quien tiene un promedio general de .291 con un porcentaje de embasamiento de .372 y no ha sido pillado en robos de bases desde el 18 de junio (una seguidilla de 16 robos exitosos), aún es el prototipo de bateador inicial de casi todo manager.
Hasta Girardi, quien trata de evitar todos los temas que puedan llegar a oler a controversia, no pudo evitar meterse en ésta.
"Puede ser. Puede ser'', contestó cuando le preguntaron si podría regresar a Gardner a la posición de bateador inicial, al menos ante un abridor derecho. "Quiero decir, va tan bien que es algo que definitivamente tendré en cuenta. Vamos a esperar y ver qué pasa''.
Eso sólo puede interpretarse como esperar a ver si, pasado el torrente emocional de su búsqueda de los 3.000, Jeter logra compilar una producción ofensiva consistente.
La teoría de que Jeter podría padecer de un bajón post hit 3.000 le fue ofrecida a Girardi, pero él la rechazó. "No ha tenido muchos hits, pero tuvo algunos buenos turnos al bate, algunos hits muy buenos, e hizo un gran hit en Toronto para nosotros'', dijo Girardi. "Pero para mí ha sido el mismo tipo, tal vez hasta un poco más relajado ahora que eso ha terminado, porque ahora está en su rutina normal''.
Lo que podría significar que el Jeter que ves ahora -- .263, .322 de OBP, apenas nueve bases robadas y 17 hits de extrabases -- es el Jeter que verás por el resto de la temporada, no excelente, no terrible, y no muy diferente del Jeter que vimos el año pasado.
En ese caso, puede que no sea algo malo que Girardi lo reemplace con Gardner en el tope de la alineación y baje una posición a todos los demás hasta el regreso de A-Rod, lo que significaría tener a Jeter de No. 2, a Granderson de No. 3, y mover a Mark Teixeira -- aún con una campaña ofensiva extraña -- al No. 5 con Robinson Canó fijo en el cuarto bate.
"Hay muchas cosas diferentes que puedes probar'', dijo Girardi. "Pero creo que los hombres se acostumbran a ver sus nombres en un cierto lugar y se identifican con ese lugar. Creo que a veces puedes quedar atascado si intentas atrapar un relámpago en una botella. Mueves a un hombre porque está encendido y perturbas a toda tu alineación''.
Si tenemos en cuenta la forma en que los Yankees han bateado últimamente, una pequeña interrupción tal vez no sea algo tan malo. Es posible que Girardi quiera evitar este movimiento porque le preocupa que pueda resultar en una repetición de la huelga de un día de Jorge Posada cuando el manager trató de bajarlo al noveno lugar del orden en mayo.
Pero esto de ninguna manera sería algo tan radical, y no debería retratarse ni percibirse como una degradación del jugador más querido de los Yankees de nuestra generación.
"Tengo que hacer lo que creo mejor para el equipo'', dijo Girardi. "Y cuando miras una alineación, miras cómo funciona en conjunto independientemente de un hombre. Y no, no tengo miedo de tener esa conversación''.
Entonces, ¿qué es lo que impide que tenga lugar? Tarde o temprano, Brett Gardner va a reemplazar a Derek Jeter como primer bate de los Yankees. ¿Qué mejor momento que ahora?
Por Wallace MatthewsESPNNewYork.com.