El Kung Fu Panda y los Navegantes del Magallanes aguardan pacientemente por el séptimo juego de la gran final contra los Cardenales de Lara, que se celebrará esta noche en el José Bernardo Pérez de Valencia.
Valencia.- Pablo Sandoval y los Navegantes del Magallanes aguardan pacientemente por el séptimo juego de la gran final contra los Cardenales de Lara, que se celebrará esta noche en el José Bernardo Pérez de Valencia.
"En Magallanes tenemos a 34 peloteros en el roster y todos somos líderes. Yo estuve ausente en dos meses y el equipo hizo un buen trabajo. Eso es lo que caracteriza a Magallanes como un buen equipo", indicó Kung Fu Panda al comentar que cualquiera de sus compañeros puede ser el héroe de la velada.
Sin embargo reconoce que los pájaros rojos son un rival duro de vencer, así cuenten con el apoyo del público de Valencia. "Todas las finales son apretadas. Nada es fácil. Todo es con tensión. Final es final así sea en la luna", comentó.
Pero el ambidextro y sus compañeros evitan preocuparse más de la cuenta, a pesar de que esta noche pueden quedar con las manos vacías. "Es otro día más de trabajo. Si nos metemos presión todo debe salir mal. Hay que jugar concentrado y que gane el mejor".
Sandoval comparó esta etapa contra los Cardenales, con la final que perdieron vs los Leones en la 2009-10. "Esta final la he disfrutado más porque he tenido la oportunidad de estar en todos los juegos", dice quien descarta que la insistencia por quedarse con Magallanes le pase factura en Estados Unidos.
"Personas de los Gigantes vinieron a verme y ser testigo del trabajo hecho. Están contentos", concluyó.
"En Magallanes tenemos a 34 peloteros en el roster y todos somos líderes. Yo estuve ausente en dos meses y el equipo hizo un buen trabajo. Eso es lo que caracteriza a Magallanes como un buen equipo", indicó Kung Fu Panda al comentar que cualquiera de sus compañeros puede ser el héroe de la velada.
Sin embargo reconoce que los pájaros rojos son un rival duro de vencer, así cuenten con el apoyo del público de Valencia. "Todas las finales son apretadas. Nada es fácil. Todo es con tensión. Final es final así sea en la luna", comentó.
Pero el ambidextro y sus compañeros evitan preocuparse más de la cuenta, a pesar de que esta noche pueden quedar con las manos vacías. "Es otro día más de trabajo. Si nos metemos presión todo debe salir mal. Hay que jugar concentrado y que gane el mejor".
Sandoval comparó esta etapa contra los Cardenales, con la final que perdieron vs los Leones en la 2009-10. "Esta final la he disfrutado más porque he tenido la oportunidad de estar en todos los juegos", dice quien descarta que la insistencia por quedarse con Magallanes le pase factura en Estados Unidos.
"Personas de los Gigantes vinieron a verme y ser testigo del trabajo hecho. Están contentos", concluyó.
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